Cuando estaba de estudiante
internacional en USA, necesitaba renovar mi pasaporte, pero en el estado de
Utah no teníamos consulado peruano, así que aprovechando que iba a Washington
DC en busca de un intership (pasantía), decidí renovar mi pasaporte en dicha
ciudad capital de USA. La sorpresa que me di cuando llegue al consulado peruano
de dicha ciudad, es que los empleados consulares me dijeron que no podían
renovar mi pasaporte - que en mi caso era solo una extensión de vigencia del
pasaporte, para lo cual bastaba ponerle los timbres consulares y asunto
resuelto – sino me dijeron que debía ir al consulado que me correspondía - es
decir al estado de Colorado - a pesar de que mi pasaporte vencía ese día. Les
indique que era obligación de ellos auxiliarme y darme los servicios
consulares, no importando donde desidia en esas circunstancias, pero siguieron
en su negativa. Ante dicha negativa me identifique con mi carné de abogado y les dije
que si no me mostraban en la ley donde estaba ese concepto o “directiva”, los quejaría por dejarme en estado de peligro legal y
los denunciaría en Lima por el delito de omisión de funciones. Después de una
breve consulta por teléfono con sus superiores supongo, procedieron a extender
la validez de mi pasaporte.
Me pregunte a cuantos
compatriotas les habría pasado los mismo y no fueron auxiliados por los
consulados, y que en mi caso tuve que identificarme como abogado y reclamar
para que me presten el servicio. Así que al volver a mi casa decidí hacer un
artículo al respecto con ocasión que en el año 2008 nombraron a David Utrilla
como Cónsul Honorario del Perú en el Estado de Utah, que dicho sea de paso lo ha
venido haciendo muy bien.
Aquí comparto el artículo que
escribí y que lo he reeditado para esta revista.
LOS CONSULADOS HONORARIOS DEL ESTADO DE UTAH
En el Estado de Utah existían 24 delegaciones consulares debidamente
inscritas, más el nuevo cónsul honorario peruano. De estas 25 delegaciones consulares
acreditadas en Utah, solamente una, la mexicana, es un consulado regular, los
demás son consulados honorarios, de los cuales solo 5 son de países latinos,
incluyendo a Brasil y España.
¿QUÉ ES UN CÓNSUL HONORARIO?
En primer lugar un cónsul es un
cargo de servicio que se da en el exterior. El cónsul es nombrado por parte del estado para
ejercer una función consular en el
extranjero. Básicamente la función del cónsul es de asistir a los ciudadanos
del país de origen, en la tramitación de diversos documentos, defenderlo y
orientarlo en sus derechos, legalización de documentos oficiales, poderes, fe
de vida, actas de nacimientos, otorgar y renovar pasaportes,
tramitación de documentos de identidad nacionales del país,
promoción económica, cultural y turística, etc.
Un cónsul honorario puede hacer todo esto, salvo las que
les estén prohibidas expresamente por la ley del país. Por ellos si su país
tiene un cónsul honorario en Utah, consulte la página web del Ministerio de
Relaciones Exteriores de su país, y verifique que puede hacer su cónsul
honorario.
Una de las funciones del cónsul es la de actuar como un
notario del país de origen, por lo que puede extender escrituras públicas y
hasta fungir como traductor
juramentado.
El Cónsul
Honorario generalmente sufraga los gastos de la oficina consular de su propio dinero,
pero en la mayoría de los países se les asigna una cantidad de dinero como
mantención de la oficina.
Los consulados, honorarios o no, están obligados a
atender al público en un horario determinado al público y a tratar con respecto
al nacional del país. El incumplimiento de sus funciones es motivo de queja de
los usuarios, que pueden canalizarlo a través del Ministerio de Relaciones
Exteriores del país de origen. Ahora con el internet es muy fácil de hacerlo.
Si se encuentra solo en este país, no dude acudir a su
consulado en caso de urgencia, ellos están en la obligación de ayudarlo, aun
para casos extremos. El consulado es una ayuda para usted para el exterior.
David Torres Barreto
Foto: Website Ministerio de Relaciones Exteriores Perú